Las rutas de las castañas en Gran Canaria ofrecen una inmersión única en la belleza otoñal de la isla. Con paisajes coloridos y una rica historia agrícola, cada ruta presenta su propio encanto, ofreciendo a los aventureros una experiencia diversa y emocionante.
¿Cuándo es la época de las castañas?
La temporada de castañas en Canarias se inicia con la llegada del otoño y las primeras lluvias, entre los meses de noviembre y diciembre. La castaña es un fruto seco que, aunque suene un tanto paradójico, necesita agua para poder crecer y desarrollarse.
Suelen darse en zonas de medianías, especialmente en municipios como Teror, Firgas, San Mateo, Valleseco, Tejeda o Artenara. En Gran Canaria hay aproximadamente 80.000 castañeros repartidos en 380 hectáreas.
Los 4 mejores senderos para coger castañas en Gran Canaria
Además de dar uno de los frutos más vendidos del otoño en Gran Canaria, las castañas son una excelente excusa para conocer los senderos de la isla.
Te proponemos una aventura a través de los caminos reales de Gran Canaria, donde podrás descubrir paisajes de ensueño, con un toque de color otoñal, con los castañeros como principales protagonistas.
1. La Ruta de las castañas de Valleseco
La travesía por Valleseco para buscar castañas se inicia en su pintoresca plaza y sigue el serpenteante curso del barranco Guiniguada. El paisaje otoñal resplandece con los tonos rojizos, amarillos y anaranjados de los castaños, creando una sinfonía de colores única en su clase.
Tendrás el privilegio de admirar no solo los castaños, sino también otros árboles de la laurisilva, como laureles, madroños y cedros. Los múltiples miradores a lo largo del camino ofrecen vistas panorámicas que cautivan los sentidos.
El clímax de esta ruta se alcanza en el barranco de la Virgen, donde tendrás la oportunidad de recolectar castañas y deleitarte con un almuerzo en medio de la naturaleza.
- Dificultad: fácil
- Recomendaciones: calzado adecuado, ropa cómoda, agua y comida
- Duración: 2 horas
2. Ruta de las Cuatro Presas de Firgas
Nos trasladamos al municipio vecino Firgas, donde da comienzo esta ruta circular de 12,5 kilómetros que atraviesa las presas de Cambalud, El Palmar, La Umbría y Firgas. Alineada con la esencia otoñal, los castaños pintan el camino con sus tonalidades vibrantes, ofreciendo una experiencia similar pero única en comparación con Valleseco.
Los miradores estratégicamente ubicados permiten deleitarse con vistas impresionantes de la isla, culminando con un merecido descanso hacia el pueblo.
- Dificultad: media
- Recomendaciones: bastones de senderismo, calzado cómodo, agua y comida
- Duración: 3 horas
3. Ruta de los castaños de Artenara
El municipio más alto de Gran Canaria, Artenara, alberga una gran cantidad de castañeros. El punto de partida, desde el casco antiguo del pueblo, lleva a una travesía de aproximadamente 12,74 kilómetros ascendiendo hacia el majestuoso Roque Bentayga, en el municipio de Tejeda. La belleza otoñal se despliega con los colores vívidos de los castaños y otros árboles típicos de la región.
Al llegar a la cima, serás recompensado con vistas espectaculares de la isla, añadiendo un toque único a esta ruta.
- Dificultad: media
- Recomendaciones: bastones de senderismo, calzado de montaña, ropa cómoda, agua y comida
- Duración: 4 horas
4. Ruta de los castaños de San Mateo
Para finalizar, nos trasladamos al municipio de San Mateo, donde descubrimos una ruta un tanto desconocida. Partiendo desde San Mateo, esta ruta circular de 13,75 kilómetros lleva a los aventureros por los alrededores del municipio: camaretas, la lechecilla, el calero, cueva grande o la asonada.
Similar en esencia, pero con particularidades propias, esta ruta ofrece una visión única de los paisajes otoñales y vistas panorámicas de la Vega de San Mateo que quitan el aliento.
- Dificultad: media
- Recomendaciones: calzado adecuado y cómodo, ropa cómoda, agua y comida
- Duración: 5 horas
Gran Canaria, la isla de los castañeros
Las Rutas de Castañas en Gran Canaria ofrecen una experiencia inolvidable para los amantes de la naturaleza. Con cada ruta presentando su propia mezcla de paisajes, colores y atracciones, la isla se convierte en un paraíso para los senderistas.
Si quieres vivir una experiencia alejada del turismo más tradicional y en contacto con la naturaleza, escoge a VillaGranCanaria para hospedarte en uno de sus cientos de villas rurales repartidas a lo largo y ancho de la isla.
